Bakunin deseaba formar una organización: la
Fraternidad Internacional, esta estaría guiada por el ateísmo, el federalismo,
el socialismo (desde su concepción) y la revolución; rechazando explícitamente
cualquier autoridad, así como el nacionalismo y el derecho de herencia.
Sin embargo los esfuerzos por formar esta hermandad
tuvieron poca adhesión: la afluencia fue
sólo de un grupo de italianos, dos polacos, la princesa Zoe Obolensky (mecenas
de varios revolucionarios, entre ellos Bakunin) y el propio Bakunin.
Decepcionado de que la unificación italiana no tuviera
mayores alcances se traslada a Suiza para participar en el Congreso que se
llevaría a cabo en Ginebra. La convocatoria a este congreso estaba formada por
reconocidos intelectuales tales como Stuart Mill, Garibaldi, Víctor Hugo,
etc. Se convocó también a los delegados
obreros internacionalistas. Así, el congreso obrero se adhirió a la
convocatoria de la Liga, aunque para los internacionalistas la abolición de los
ejércitos y la permanencia de la paz sólo eran etapas en su marcha hacia el
socialismo.
En este congreso, Garibaldi y Bakunin fueron los más
reconocidos, el ruso denuncio al Estado como causante de la opresión de las
masas populares y laboriosas en favor de una clase privilegiada. Para Bakunin debía abolirse el estado y se
debían formar uniones impuestas por la libertad y el deseo de las masas.
En este congreso, comprobaría Bakunin la real
importancia de la Internacional, la valía de sus dirigentes y su carácter
revolucionario. Sin embargo, muchos de los internacionalistas lanzaron argumentos
que podrían interpretarse como críticas a lo dicho por Bakunin.
Al finalizar el congreso de Ginebra se estableció un
comité central, compuesto por dos representantes de cada país. Bakunin y muchos
de sus seguidores obtuvieron puestos en este comité, al que luego sometieron un
programa basado en el federalismo, el socialismo y el ateísmo.
Al ver como los internacionalistas lograban
importantes reivindicaciones, Bakunin decide solicitar su ingreso en la sección
central de Ginebra de la AIT, aunque esto no conllevó su salida de la Liga por
la Paz y la Libertad. Por el contrario, Bakunin intentó hacer de la liga un
organismo paralelo a la Internacional, constituyendo así un órgano político y de
reflexión que guiara a la Asociación de trabajadores.
Para la segunda reunión que organizaría la Liga, se
enviaron invitaciones y halagos a la Asociación Internacional de Trabajadores
de Europa y América.
En el Congreso de Berna en 1868, Bakunin volvió a
presentar sus argumentaciones anarquistas, pero estas propuestas fueron
derrotadas por amplia mayoría, por lo que, al concluir la asamblea, publicó un
documento que denominó: “Protesta colectiva de los miembros que abandonan el
Congreso”, fue suscrita por 18 delegados junto con Bakunin. Luego de esto, los
firmantes del mencionado documento se reunieron para constituir una nueva
entidad denominada: Alianza Internacional de la Democracia Socialista.
No hay comentarios:
Publicar un comentario